Pero vengo a añadir un poquito más de salsa al tema. Nada, unas pocas líneas más light.
Solo quería comentar que ayer no quería ser excesivamente dramática respecto al acceso a nuestra intimidad que tienen los servicios de inteligencia norteamericanos. Puse ejemplos muy básicos para ilustrar el acceso a cosas banales de nuestra vida cotidiana, como por ejemplo los productos alimenticios que nos gustan o nuestras conversaciones privadas.
Pero es sabido que también pueden acceder a nuestros análisis sanguíneos, informes médicos, movimientos bancarios, emails, acciones en bolsa, patrimonio, declaración de la renta, todo.
Vamos a decir que tienen el poder de acceder a cualquier recoveco de nuestra vida privada.
De ahí la importancia de ser claros, coherentes y sobretodo FIRMES ante cualquier tipo de acto que viole nuestros derechos humanos.
El mundo al revés se refleja en millones de momentos diarios en cualquier lugar del mundo.
Desde sucesos superficiales de nuestro día a día de urbanitas, a batallas dramáticas como la actual en Standing Rock (Dakota Norte y Sur, EEUU). Donde los propietarios nativos de las tierras están siendo machacados por el mero hecho de defender el agua potable de sus terrenos frente a la construcción de un oleoducto que contaminaría el agua que beben y beberán millones de personas.
#NoDAPL
Es hora de ayudarnos entre nosotros, de ponernos el "uniforme" de guerra pacífica, quitarnos de encima esa vergüenza por el que dirán; y ser firmes y coherentes con lo que nos respeta a nosotros y al bienestar de las futuras generaciones.
No es ninguna broma, estamos hablando del agua que vamos a necesitar beber dentro de pocos años y de las tierras que nos dan de comer. De asegurarnos nuestra futura vida, sencillamente.
Y con esto me despido, estoy muy cansada ya. El mundo al revés se ha cargado el sentido común y es agotador!
Pero mejores tiempos vendrán...hasta entonces, buenas noches,
Sofia.
Es hora de ayudarnos entre nosotros, de ponernos el "uniforme" de guerra pacífica, quitarnos de encima esa vergüenza por el que dirán; y ser firmes y coherentes con lo que nos respeta a nosotros y al bienestar de las futuras generaciones.
No es ninguna broma, estamos hablando del agua que vamos a necesitar beber dentro de pocos años y de las tierras que nos dan de comer. De asegurarnos nuestra futura vida, sencillamente.
Y con esto me despido, estoy muy cansada ya. El mundo al revés se ha cargado el sentido común y es agotador!
Pero mejores tiempos vendrán...hasta entonces, buenas noches,
Sofia.
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