L' A

He de reconocer que no soy muy partidaria de "los días hashtag", "días D#".

Pero en fin, hoy 8 de marzo del 2017, vamos a utilizar este día de la mujer para dedicar unas líneas por la eterna y continua lucha femenina.
Una carrera de fondo mucho más larga y dura que un sólo día al año.

Podría hablar mucho tiempo y derramar mucha tinta sobre la mujer actualmente.
Podría dar voz a todas esas mujeres que han luchado tanto por nosotras, las que han muerto por nosotras, y las que seguimos en la lucha.
Podría ponerme a hablar de mi experiencia personal, de todas las caras de la vida que me he tenido que cruzar como mujer, pero no es el lugar ni el momento todavía.

A estas alturas, poco que decir y todo que decir. 


"Cásate y serás madre de un adulto" me dijo una señora en Madrid hace muchos años.

"Mi mujer ha sacado un bebé de ahí dentro, ¿cómo no voy a cambiar unos pañales?" dijo el marido de una actriz famosa.

Así de simple, pero parece que así de complejo.


Es obvio que nosotras tenemos el don de generar descendencia.
Crear vida en nuestro cuerpo.
Un don que tiene un fuerte coste físico, emocional, material o logístico; una transformación brutal, un esfuerzo y un sacrificio por un proyecto conjunto maravilloso.
Si no llega a ser por nosotras, aquí no habría nadie.

Siendo conscientes de la importancia y necesidad de nuestro sacrificio (¿el 'pecado' original?) por el avance de la humanidad, ¿de verdad todavía estamos donde estamos?

Me he cruzado, y lo digo con humildad, con prácticamente la mayoría de las caras del alma; desde la alegría hasta la envidia, el miedo, la pureza, la bondad, la maldad, y todo lo de alrededor.

Y una acumula aprendizajes, lecciones y conclusiones que transformo en algunas preguntas como deberes para reflexionar y alargar este día D# hasta el mes siguiente por lo menos!

¿Somos conscientes las mujeres de lo maravillosas que podemos llegar a ser?
¿Somos conscientes de lo mucho que nos tenemos que querer?

¿Destruye más la ruda simpleza masculina o la dantesca envidia femenina?
¿Nos machacan exageradamente ciertas mujeres por sus propias carencias?
¿Por qué todavía existen mujeres que necesitan pisotear a otras para creer que ellas crecen?

¿Enseñamos a nuestras niñas y chicas a ser buenas personas?
¿Aprendemos y enseñamos que la superficialidad está sobrevalorada?
¿Enseñamos a nuestras jóvenes a invertir en su cerebro más que en un vacío posado para una foto?
¿Enseñamos a nuestras niñas y chicas a competir sólo con ellas mismas?
¿Sabemos crecer y exigirnos más a nosotras mismas sin compararnos continuamente con el resto?
¿Sabemos ayudarnos de verdad entre nosotras?

¿Tenemos miedo a los hombres?
¿Tenemos miedo a su fuerza física o a que se rían de nosotras?
¿Tenemos miedo a perder a algún hombre pero nos perdemos nosotras en el camino?
¿Son justos los hombres cuando se ríen de nuestra sensibilidad?
¿Son conscientes los hombres de que nuestro cuerpo no es en absoluto igual de estable que el suyo?

¿Son inteligentes ellos al tratarnos muchas veces como si fuésemos tontas?

¿Son justos los hombres cuando definen unos estándares de belleza que dilapidan nuestra esencia y nuestra potencial magia?
¿No será que la masculinidad necesita minimizar el rol de la mujer para hincharse?
¿Quién debería definir la perfección de una misma?
¿Existe la perfección humana?
¿La perfección en qué?
¿Qué es la perfección?



Esto es una oda a las mujeres fuertes y que invierten en ser más fuertes mentalmente.
Esto NO es una oda a las mujeres arrogantes y demás venenos ridículos.

Una oda a esas mujeres que lo bonito lo convierten en maravilloso.
Las mujeres inteligentes.
Las mujeres que comparten su sabiduría con dulzura.
Las mujeres agradecidas.
Las mujeres que conocen sus defectos, los aceptan y saben reírse de ellos.
Las mujeres rebeldes y macarras por una buena casa.
Las mujeres que se alegran de corazón por el bien de las demás.
Las mujeres ambiciosas en las batallas y en los logros por los que luchan.
Las mujeres valientes una y otra vez.
Las mujeres que no se rinden.

Las niñas que ayudan en vez de envidiar.
Las chicas creativas, creadoras y constructoras.
Las jóvenes divertidas, graciosas, independientes.
Las abuelas modernas.
Las niñas a las que un atontado les ha hecho sentirse de menos porque no ha sabido leer entre líneas.
Las chicas cuyo mantra es: "Pues tú te lo pierdes".

Las mujeres sonrientes.
Las mujeres humildes, soñadoras y luchadoras.
Las niñas ambiciosas en sus sueños y aprenden a silenciar las tonterías adultas.
Las chicas que ven y aprenden que "los likes" son algo pasajero sin mérito alguno.
Las mujeres que no entorpecen el camino de las demás.
Las mujeres que se ponen mochila al hombro y dicen "allá voy".
Las mujeres vascas.
Las chicas que saben crecer entregándose ellas mismas el cariño y amor que buscan en un hombre.
Las mujeres que aprenden a pasar página.
Las mujeres que luchan solas por lo que quieren.
Las niñas, chicas, mujeres diamante en bruto.
Las mujeres contra viento y marea.
Las mujeres - pitikis.

[etc]

Y a todas y todos los que minimizan estas grandes personas, vergüenza os tendría que dar.


[¡Menos mal que no quería escribir un post hoy!]