Los primeros en llenarse la boca hablando en nombre de la Constitución, del Estado de Derecho y de la Democracia española han sido los políticos del partido popular, que cuando el viento ya no sopla a su favor ¿entonces se pican?
Esta moción de censura existe gracias al artículo 113 de la Constitución, que se incluye para contemplar la opción de "exigir responsabilidad política del Gobierno mediante la adopción por mayoría absoluta de la moción de censura".
Para mi la satisfacción generalizada viene de ahí, tanto escuchar hablar del respeto al Estado de Derecho, a la Constitución, a la democracia, que por fin han ganado de verdad.
Nos encontramos ante una sociedad empachada, harta, cegada de información por la innumerable lista de corruptos, mentirosos, chapuceros disfrazados de sabios, hinchados por una superioridad displicente que no tiene lugar, ni es coherente ni es consecuente.
Una sociedad a la que se le exigen innumerables sacrificios y esfuerzos, pero luego tiene que aguantar lecciones de políticos cuya credibilidad ya no solo queda en entredicho, sino que un juez ha dictado sentencia en contra de la credibilidad del presidente de nuestro país. ¿Qué más querían que ocurriese?
Parece un punto de inflexión a todo lo que se han reído de nosotros a la puta cara. Como si fuésemos gilipollas y ellos los grandes iluminados de la Corte de Luis XIV.
Me parece importantísimo que se les haya cortado por fin las alas a tanto pomposismo del partido popular. Sobretodo porque sino este país, a nivel social, se iba al maldito garete. Por temas tan básicos como los valores, la educación, el predicar con el ejemplo, las referencias.
Como cuando a un niño le enseñas lo que está bien y lo que está mal. Pero si luego te ve a ti hacer todo lo que está mal mientras dices que está bien, a ese niño le llenas de contradicciones, ¡le has vuelto loco! Pues multiplica eso por 40 millones de personas.
La pandereta tenía que dejar de sonar un ratito ya, que sino aquí no va a atinar nadie a hacer nada bien.
Que por fin los mecanismos constitucionales y el Estado de Derecho del que tanto se habla, han dado una alegría, un soplo de aire fresco, esperanza y soberanía a los ciudadanos de este país. La corrupción se persigue, se castiga, y se acata el castigo. Se respeta el trabajo de la justicia española, y si no quieres dimitir, existen procedimientos para que te larguemos del poder echando ostias, que ya es hora.
Esta es para mi la sensación que se me queda en el cuerpo tras los cambios de ayer 1 de junio.
Mirando a los próximos pasos, una pequeña macedonia de reflexiones, nada estrambótico ni súper innovador, sino más bien puro sentido común:
- Al PP le pediría encarecidamente que tomen un perfil bajo, discreto; mientras reflexionan y dan vuelta a su partido. Creo que es el momento perfecto para que se rejuvenezcan, se bajen de sus vacías arrogancias, y definan una profunda transformación ideológica, estratégica y de equipo de personas. Por el bien de su partido, y por la felicidad de esta sociedad.
- Al nuevo gobierno entrante, pediría relativa calma en la formación de gobierno. Está claro que hay que comenzar a trabajar pronto y fuerte; pero creo que el papel de los ministros es más importante de lo normal; de cara a liderar y gestionar los cambios durante este año, bajo unos presupuestos definidos por otro partido. Me refiero, no es lo mismo que te entreguen una cartera ministerial con toda una legislatura de 4 años por delante donde puedes actuar "libremente"; que recibir una cartera ministerial en plena andadura, con directrices definidas por el "bando contrario". De ahí la importancia en la elección de los "cerebros" ministeriales, de su conocimiento y expertise en el sector, en las medidas específicas y su plan de acción (llevar la estrategia a operativa) ante el difícil proyecto.
También pediría cierta calma que no rompa la estabilidad y coherencia al cambio de gobierno, y por lo tanto a nuestro país. No creo que a estas alturas del año y de la legislatura, sea necesario llegar y arramplar con todo (hablando así llanamente). Mirad por ejemplo las catástrofes continuas en los programas educativos españoles, que varían tanto como el color de los partidos políticos al poder.
Creo que es importantísimo priorizar, analizar las medidas y cambios según la ecuación de esfuerzo vs. impacto.
Si realmente va a ser un gobierno tan difícil de gestionar, mejor guardar energías para los pactos y negociaciones importantes, y dejar los cambios con menos impacto para una segunda fase.
Es importante que los presupuestos acordados se mantengan, estamos a junio, no nos podemos permitir discutir y acordar otra vez nuevos presupuestos. Ya vendrán nuevos años con nuevos presupuestos, ahora a hacer lo mejor con lo que hay a día de hoy.
- Por otro lado, de periodistas y políticos se escucha la obvia dificultad de este gobierno del PSOE para gobernar con solo 84 escaños. Pero si os digo la verdad, a mi como ciudadana, casi que me importa un comino. Al final que les cueste que se pongan de acuerdo entre ellos o no...casi que ni me va ni me viene. Los populares se ponen de acuerdo súper bien y súper rápido entre ellos para gobernar y no por ello es mejor. Que tengan que discutir, pulir propuestas, ceder, priorizar, escucharse y entenderse mejor me parece...no sé, de clase básica de primero de Ciencias Políticas no? Llamadme naive, pero así me parece mucho más enriquecedor, plural y acorde a la realidad de la sociedad. Me parece que puede ayudar a que se diluyan los enormes egos políticos, y llegar a conseguir pactos adaptados a las múltiples exigencias y necesidades sociales. Que se les haga más difícil de lo normal...eh...es lo que hay amigo.
- Ya que estamos, hago otra petición difícil. Que se dejen de tanta campaña mediática y se centren en la gestión del país. Que si quieren hacer campaña, que nombren a personas del partido centradas en hacer campaña; pero que los diputados y ministros en el poder no estén 24h dependientes y excesivamente influidos por la opinión pública, los likes, los votos y las subjetividades del éxito o fracaso de sus responsabilidades; que se centren en crear un gobierno fuerte, una economía potente y una sociedad de bienestar en crecimiento. El aplauso del público vendrá después, por el trabajo bien hecho y la satisfacción de la sociedad que note verdaderos cambios en su día a día. Un cambio en las campañas políticas que en las próximas elecciones no vengan a contar lo que van a hacer; sino lo que ya han conseguido en este nuevo gobierno tan variopinto e histórico.
No nos interesa tanto el color del partido político, nos interesa que los ingresos sean mayores que nuestros gastos, que los ingresos vayan en aumento y los gastos en disminución. Cada ciudadano con sus circunstancias; pero al final, ingresos y gastos. Los presupuestos generales son presupuestos a pie de calle.
- Creo que también es importante que seamos conscientes y agradezcamos el trabajo de jueces, abogados y demás investigadores de la trama Gürtel que llevan años en ello y todavía los años que les quedan; lo difícil y arduo que será todo ello. Gracias porque al final todo llega.
Os dejo, no tengo la escritura en mi mejor momento; pero creía importante compartir estas reflexiones. Creo que necesitamos que la sociedad española esté centrada mirando hacia un mismo rumbo, y con el respeto a ciertos valores básicos como es la justicia. Ojalá que sea el comienzo de años de prosperidad, bonanza y cambios nunca vistos en nuestro país.
Seguiremos hablando!
Saludos,
Sofia.
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